La gran reforma educativa es dar de comer a los niños, porque se pueden cambiar currículos, planes de estudios, capacitar maestros, pero si el pequeño no llega en condiciones para asimilar la experiencia escolar, no sacará ningún provecho.
León Trahtemberg, presidente del Consejo Nacional de Educación de Perú, especialista en educación, comunicador social, administrador de empresas y director de un centro educativo, expondrá sobre esta materia hoy en la cena de gala del Patronato de Nutrición, que se desarrollará en el Hotel Marriott, salón Campo Alegre a las 7: 00 p.m.
Con una donación de B/. 150 usted podrá ayudar a seguir «Sembrando cariño», lema del Patronato que cumple 10 años del inicio de las Granjas de Producción Sostenible, creadas para combatir la pobreza.
Trahtemberg en su ponencia de esta noche, «De la promesa a la condena», sustenta que el niño que llega a la escuela sin haber sido adecuadamente nutrido, estimulado, atendido en su salud, no tendrá ninguna posibilidad de competir con los que vienen de hogares solventes.
Para Trahtemberg, la escuela pasa a ser el consolidador de las diferencias más que un igualador de las oportunidades.
«Nos matamos pensando cómo reformar una escuela, cuando lo que hay que reformar es cómo llegamos a los niños antes de llegar a la escuela», afirma.
Hay que ocuparse primero de esta etapa donde la nutrición, la salud, las vacunas y la atención temprana, la estimulación muscular, lingüística, neurológica, son absolutamente decisivas, sino un niño en la escuela no tiene nada que hacer, pues ya cuando llega al primer grado, para muchos es tarde.
La idea de esta conferencia es que los asistentes comprendan lo decisivo de esta etapa, que prepara o condena a los chicos que a los 6 años van a la escuela.
Trahtemberg, con más de 20 años en los avatares educativos, piensa que hay que hablar con los políticos y generar opinión para comprometerlos y que se ocupen de esta situación.
Si no se les atiende a nivel de nutrición, salud, educación, la supuesta igualdad de oportunidades cuando asisten a la escuela no existe, manifiesta Trahtemberg.
Se quiere que en Panamá se atienda esta experiencia, aseguró Manuel Alzamora, organizador del evento.