El Ministro de Educación Dr. Marcial Rubio Correa tiene por delante la nada fácil tarea de desmontar un Ministerio de Educación organizado para fines electorales y con altos niveles de ineficiencia, burocratización y no poca corrupción, para convertirlo en un ministerio sano preparado para facilitar los avances del próximo quinquenio. Respecto a los temas centrales de la agenda del Ministro Rubio conversamos con el Profesor León Trahtemberg en la entrevista mensual que le concede a Tiempos del Mundo.

T de M: ¿Qué opinión le merece el Gabinete de la Transición convocado por el Presidente Valentín Paniagua?

Creo que ha conformado un buen equipo, con alta estatura ética, profesional y académica que responde al abanico político que eligió al Presidente Paniagua. No me extrañaría que más de uno luego de mostrar sus talentos sea requerido para continuar en el cargo con el próximo gobierno. También creo que será capaz de convertirse en el colchón entre el gobierno de Fujimori-Montesinos y el nuevo gobierno 2001-2006. En ese sentido permitirá romper la tradición política peruana de que todo gobierno que entra gasta sus primeras energías en atacar, perseguir y despedir a la gente del gobierno anterior para justificar sus propias acciones.

T de M: ¿Y qué le parece el Ministro Marcial Rubio Correa al frente del sector Educación?

El Dr. Marcial Rubio es un abogado que dirigió tanto Desco como la prestigiosa revista Quehacer, y hace años está dedicado a la educación superior en su condición de catedrático y vicerrector administrativo de la Universidad Católica. Es reconocido y apreciado en la universidad por su cordialidad, rectitud y seriedad. Reúne los méritos personales y las condiciones profesionales para hacer un buen trabajo. Es cierto que su mayor experiencia no está en la educación escolar y pública que son los ámbitos de acción principales del Ministerio de Educación, pero creo que sabrá asesorarse para estos campos. Además, no creo que deba asumir el rol de experto en educación sino más bien de líder de una nueva manera de trabajar en el ministerio y de comunicarse con la ciudadanía en los planos éticos y cívicos. Él tiene que romper la muralla que erigieron los ministros fujimoristas entre los gobiernistas y los de afuera, y crear las bases para un gran Acuerdo Nacional por la Educación en el que participen todos los sectores, gremios e instituciones de la nación.

T de M: ¿Cuál es entonces la agenda que sí debería abordar el Ministro Marcial Rubio?

Hay cinco tareas centrales. Una es evaluar la calidad, cantidad y moralidad de los recursos humanos con los que cuenta el ministerio, para reducirlo a un conjunto de personas calificadas ética y profesionalmente, desprendiéndose de los ineficientes y corruptos. Otra es garantizar la limpieza y equidad en las licitaciones y adquisiciones que el ministerio tiene que hacer para cubrir las necesidades del inicio del año escolar 2001. La tercera, en sintonía con la anterior, publicar de inmediato toda la información estadística y de rendimiento de los alumnos y profesores de la que dispone el ministerio y que se mantuvo en secreto con fines electorales. La cuarta, detener los programas de capacitación Plancad para reorientar las estrategias de capacitación. No hay ninguna evidencia conocida de que el Plancad haya tenido algún impacto favorable el rendimiento de los profesores y alumnos. Mas bien se conoce lo contrario. Quinto, buscarse colaboradores capaces que lo ayuden a reorientar los paquetes acordados con la cooperación internacional.

T de M: Muchas veces se ha criticado al Ministerio de Educación por ser burocrático y contar con normas muy engorrosas y que entran en conflicto unas con otras. ¿Qué hacer con esto?

Aquí Marcial Rubio puede aprovechar su conocimiento como abogado y el acceso a colaboradores del ámbito del derecho para articular y simplificar toda la normativa educacional para hacer que los procedimientos sean mucho más expeditivos y automáticos. Algunos temas se pueden resolver con resoluciones supremas y ministeriales y otras podrían requerir leyes del congreso. Ocurre que la Ley de Educación de 1982 y sus reglamentos, así como la Ley del Profesorado y otras que aún están vigentes, se sustentan en la constitución de 1979, pero colisionan con diversas leyes y reglamentos aprobados después de la constitución de 1993 que tiene otro espíritu, como por ejemplo los referidos a la educación privada.

T de M:¿En qué situación está el Bachillerato?

Este proyecto nació improvisado, como resultado de una conversación del entonces Presidente Fujimori y el Ministro Palermo, y fue anunciado al público sin contar con el respaldo de un documento técnico sólido, dando la contra a la comunidad educativa especializada que le encontraba mil objeciones. Por eso le tomó al ministerio cerca de 8 meses presentarle a la opinión pública la propuesta en detalle. Además no había financiamiento y se mintió a la opinión pública al decir que este modelo de bachillerato lo tenían muchos otros países, cosa que no es cierto. A lo que le llaman bachillerato en casi todos los países del mundo es a la alta secundaria, y no a un nuevo nivel post secundario. Que yo sepa tampoco existen países en los cuales este bachillerato sea encargado a las universidades como se propuso en el Perú.

T de M:¿Cómo debería quedar entonces este bachillerato?

Los defensores del bachillerato aducen que ha introducido una nueva metodología de trabajo y una renovación en los enfoques curriculares y tutoriales. No veo razón para que este cambio no se haya introducido a toda la secundaria que se cae en pedazos. Se han gastado millones de dólares para una experiencia que ha fracasado. De cada 10 egresados del primer año del bachillerato, no quedan ni cuatro en el segundo año, y los que quedan son los alumnos de rendimiento más bajo, que son los que no logran ingresar a la universidad después del primer año. ¿Qué diseño experimental es éste que hace que solo los fracasados culminen los dos años del bachillerato? Yo creo que la unidad ministerial que se ocupa del bachillerato debe ser asumida por la Dirección Nacional de Secundaria y convertirlo en el segundo ciclo de la secundaria, usando todo el dinero del bachillerato para fortalecer la secundaria.

T de M:¿Estará en condiciones el Ministro Marcial Rubio para hacer todo esto?

Creo que el Presidente Paniagua y el Ministro Rubio tendrán que elegir entre no hacer muchos cambios para no irritar a nadie, difiriendo los cambios fundamentales para el próximo gobierno, o definir de una vez los cambios que modifiquen las estructuras ineficientes y corruptas del ministerio para así asfaltarle el piso al gobierno siguiente. Tenemos que esperar el fin del primer mes para ver cuál será el camino elegido. Ojalá no se difiera lo importante, porque el próximo gobierno no va a tener a su favor el consenso que este sí tiene, ni las facilidades para tomar medidas drásticas con apoyo del congreso que en esta transición si serían posibles.

T de M: En los últimos años ha habido mucha crítica a los medios de comunicación por su rol negativo en la educación de los niños. ¿Podrá hacer algo al respecto?

Lamentablemente dificulto que por la coyuntura electoral se puedan aprobar artículos de la ley de medios de comunicación como los que existen en casi todo el mundo, para proteger la salud mental de los niños peruanos que está siendo dañada sin freno. Sin embargo creo que puede usar su prestigio personal para procurar avanzar algo a nivel de concertación con los medios de comunicación y las facultades universitarias de comunicaciones, para elaborar algunos fundamentos que puedan servir de base para las nuevas normas en este tema. Si hablamos de educar y proteger a los niños, este es uno de los temas insoslayables.