La imagen positiva del concepto de autodisciplina deviene de concebirla como la capacidad de controlar la propia fuerza de voluntad para hacer cosas consideradas como deseables y refrenarse frente a las indeseables o para posponer una gratificación. Pero eso tiene sentido cuando implica un ejercicio libre de la voluntad, pero qué pasa si es resultado de no permitirse a sí mismos no ser disciplinados (es decir desearía ser indisciplinado pero está fuertemente reprimido). Del mismo modo lo que parecería capacidad de aplazar una gratificación puede ser una muestra de sobre control o inhibición excesiva.

Entonces ¿qué distingue al niño saludable y adaptativo del reprimido? Esencialmente la moderación y flexibilidad, es decir, la capacidad de elegir en cada situación si merece la pena controlarse uno mismo y seguir las normas en función de la relevancia que para él tenga el asunto

Si los niños se sienten muy controlados (así sea como una demanda propia que viene desde su interior), es probable que se sientan en conflicto, infelices, y quizás tengan menos probabilidades de tener éxito en las cosas que hagan porque ya no saben qué es lo que quieren verdaderamente o quiénes son realmente. Nada tiene ningún valor, ni proporciona ninguna gratificación en sí. Pueden superar muy bien sus exámenes, sacar buenas notas, aplazar las gratificaciones, pero ser sumamente infelices.

Por otro lado, definir una situación no deseable del aula como falta de autodisciplina (que debe reprimirse por parte de la autoridad) puede estar encubriendo el hecho que se prefiere culpar al alumno por perturbar el status quo o por las cosas que andan mal, en lugar de culpar al sistema o al profesor. Por ejemplo si lo que se desea es conseguir que los alumnos levanten la mano y esperen a ser llamados para hablar, en lugar de soltar la respuesta de buenas a primeras, puede culpabilizar al alumno del método del profesor que se reserva el derecho de hacer todas las preguntas y que los alumnos se limiten a contestarlas (autoritarismo docente). O, si demandan que los alumnos disciplinados cumplan con las tareas esconde la necesidad de preguntarse si estas tareas tienen algún sentido o son meros rituales impuestos por los profesores que los alumnos tienen que cumplir aunque no le encuentren sentido alguno

Parece ser que el único efecto benéfico de la autodisciplina son las notas más altas que reciben los alumnos cuyos profesores están complacidos con ellos. Sin embargo sabemos que las notas tienen un nivel de validez y fiabilidad muy bajo en relación a lo que son las cualidades educativas de las personas desde una visión integral, y que los estudiantes que se orientan a obtener notas altas tienden a estar menos interesados en lo que están aprendiendo, por lo que tienen más probabilidades de pensar de una manera superficial, ser conformistas y poco creativos

Esto se deriva de múltiples investigaciones como las de Duckworth y Seligman quienes encontraron que “el éxito parecía tanto una cuestión de atención a los detalles y las normas del juego académico como de talento intelectual. Los estudiantes con un alto rendimiento no estaban especialmente interesados en las ideas o en cuestiones culturales o estéticas. Además no eran especialmente empáticos ni tolerantes; no obstante, parecían estables, pragmáticos y orientados a las tareas, y vivían en armonía con las normas y convenciones sociales. Finalmente, en comparación con los estudiantes en general, los de mayor rendimiento parecían algo pesados y carentes de originalidad”. (Robert Hogan and Daniel S. Weiss, “Personality Correlates of Superior Academic Achievement,” Journal of Counseling Psychology, vol. 21, 1974, p. 148)

El tema de la auto disciplina (que es primo hermano de los temas similares sobre disciplina) es tremendamente importante para entender qué significa una educación “centrada en el maestro” (la autoridad, los programas, el currículo, las normas) o “centrada en el alumno” (su motivación, intereses), por ello les sugiero a los interesados en profundizar en este tema leer el artículo de Alfie Kohn “Por qué está sobre valorada la auto disciplina: La (inquietante) teoría y práctica del control desde dentro” publicado en PHI DELTA KAPPAN en Noviembre 2008, que está publicado en castellano.

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Elisa Galvez (Directora de Nivel I del Colegio Áleph) nos invita a entender el concepto de disciplina y su relación con la identidad y autonomía de niño. https://www.facebook.com/colegioaleph/videos/1807559385928127/

“Hay que recuperar la disciplina y la autoridad en la escuela” La exasesora en educación del Gobierno sueco Inger Enkvist se posiciona en contra de las nuevas metodologías educativas (LT: la pregunta es a qué le llama disciplina y a qué le llama aprender, dentro de una visión de una escuela orientada a la formación ciudadana)

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